Ir al contenido principal

CUARTO PASO: ELEVA TU COEFICIENTE ESPIRITUAL.


Pasos para la reeducación de la Dependencia  Emocional en el Centro VivirLibre.org

Click sobre la imagen para más información.
CUARTO PASO: ELEVA TU COEFICIENTE ESPIRITUAL.  


DESARROLLA O FORTALECE TU ESPIRITUALIDAD: Esto significa distintas cosas para distintas personas. Para algunos de nosotros, la idea quizá resulte desagradable... y quizá hasta estés pensando saltarte este paso, mientras que otros tal vez estén rezando decididamente a un Dios que no parece escucharlos hace tiempo. Probablemente estés pensando en qué hiciste para merecerte este castigo. 
Esto es muy importante porque cuando nos soltamos de la relación codependiente sentimos que nos caemos en un abismo. La espiritualidad (que no significa religión) es como una gran red que nos contiene al caer.
Si ya tienes este paso hecho, añade otro punto a tu auto-evaluación. 
Si deseas asistir a una sesión gratuita: www.vivirlibre.org/codependencia 
Si ya tienes este paso hecho, añade otro punto a tu auto-evaluación. 
Mañana: Quinto paso.
¡Un abrazo!
Gabby
www.mipsicologa.mx


¿Desea asistir a la conferencia del tema PATERNAJE INTELIGENTE,
“Aprendiendo a Vivir Libre: Aprendiendo a ser el papá o mamá que me 
hubiera gustado tener… Porque con amor, no alcanza.”
Impartida por la Psicóloga Clínica Gabriela Torres de Moroso Bussetti?
Fecha: Jueves 25 Julio 2013, de 17:45 a 20:00 horas
Lugar: Salón D´Luz, Roma. 
San Luis Potosí 48, Roma Norte, Cuauhtémoc, 
06700 Ciudad de México.
Adquiera sus boletos GRATUITAMENTE aquí: 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Pender y depender...

Ahora voy a permitirme hacer uso de las brillantes conclusiones de mi gran maestro Jorge Bucay, quien -entre tanto que se ha escrito sobre el tema- me parece es quien lo expone mejor sin duda. Muy inteligentemente, el maestro expone primero, lo primero: La etimología de esta sabia palabra. Las siguientes definiciones son según el website de wordreference (http://www.wordreference.com/): Pender ·          intr. Estar colgada o suspendida una cosa: las frutas penden de las ramas. ·          Estar algo en espera de solución. ·          Existir un peligro o amenaza sobre alguien o algo: la amenaza de un tifón pende sobre su ciudad. Depender ·          Estar conexo o condicionado por algo para existir o tener lugar: el desarrollo de la planta depende de varios factores. ·          Estar subordinado a algo o alguien: su cargo depende directamente del ministro. ·          Necesitar de la ayuda y protección de otra persona o de otra cosa: depende demasiado de su madre

La historia de Bolillo

Una vez, tiempo atrás, existió un perro llamado Bolillo. Por azares de la vida, Bolillo tuvo que enfrentar muchos problemas en los que se sentía perdido. Creía que nadie podía entender lo que le pasaba y que nadie había sufrido como él. No lograba encontrar la salida. Ni siquiera un alivio a todo el sufrimiento que le aquejaba. Bolillo no encontraba en donde encajar. Le parecía que la vida era injusta con él, porque lo había metido en problemas. Nunca recibió herramientas o ideas útiles para salir adelante. Creía que no había nadie con los mismos problemas.  Se sentía el más desdichado de todos los perros. Se sentía un perro sólo, entre un millón de perros.  Nadie lo escuchaba.  Esta era la vida de Bolillo. Un día iba caminando Bolillo por la calle, pensando en todos sus problemas, cuando al pasar observó que había muchos perros reunidos, hablando de problemas que se asemejaban a los de él. Esto llamó su atención y se quedó, desde fuera, escuchando todo lo que ahí se hablaba. Y a

El último e-mail a mi ex pareja…

El último e-mail a mi ex pareja… “Hola. Después de 6 meses en los que juré no volver a hablarte o escribirte aquí me encuentro escribiéndote este e-mail y dándome cuenta que aún me tiembla el pulso al pensar en ti. Pero el motivo de este e-mail no es el mismo que el de tantos otros que te escribí durante nuestra relación. No te escribo para decir que aún te amo ni para decir todo el rencor que siento por ti, porque sinceramente ya no siento nada de eso. Quiero expresarte lo que sentí al cruzarme contigo en la calle hace un par de semanas, después de 6 meses de haber terminado contigo porque tú así lo elegiste. ¡Al mirarte a los ojos aquel instante me quedé helad@! Y solo se me cruzó por la cabeza una palabra... ¡Gracias!!! ¡¡¡ Gracias por haberme ayudado a ser est@ que soy ahora!!! Y por ello te escribo este último e-mail. ¡Gracias! Por haberme hecho más segur@, más inteligente, más sensible, y menos ignorante en el aspecto emocional. ¡Gracias! Por haberme enseñado que